Gracias a su eficiencia y calidad, destaca como uno de los sitios más conectados en México y el tercer aeropuerto más ocupado del país. Brindar la mejor y más cálida experiencia al pasajero.
En ello se resume el esfuerzo y dedicación del Aeropuerto Internacional de Guadalajara, un espacio que en 1960 comenzó a trabajar para convertirse en lo que es hoy: uno de los principales centros de conexión en el occidente de México.
Desde su surgimiento hace 63 años, no solamente ha fungido como la puerta de entrada a la cultura, historia y paisajes de Jalisco, sino también como un testigo y protagonista de la transformación que ha tenido la aviación mexicana.