La inteligencia artificial (IA) es un tren que corre rápido. La sociedad está intentando alcanzarlo, pero en algunos sectores de la actividad productiva ya empieza a tomar preponderancia sobre el humano.
En un estudio realizado por la empresa OpenAI, propietaria de ChatGPT, se analizó qué profesiones están en riesgo de desaparecer debido al porcentaje de coincidencias con las capacidades analíticas y de síntesis de la IA, respecto de las necesarias del ser humano para desarrollar cierta actividad.
El resultado es contundente para las áreas de matemáticas, impuestos, escritores, auditores, periodistas y en el ámbito legal, las cuales presentan un 100% de coincidencias.