La innovación corporativa es un proceso dinámico y estratégico que va más allá de la creación de algo completamente nuevo y disruptivo, como lo hicieron gigantes como Netflix, Uber y Airbnb al transformar radicalmente sus respectivos sectores.
También abarca mejoras menores en productos, servicios o modelos de negocio existentes, con el objetivo primordial de generar valor para todos los stakeholders, como clientes, inversores, colaboradores y la sociedad en general, asegurando resultados positivos y sostenibles a largo plazo.
Innovar nos ayuda a ser más competitivos, incrementa la rentabilidad, impacta en el crecimiento del negocio, crea mejores conexiones con nuestros clientes, aumenta el nivel de relevancia de la empresa y, lo más importante: ¡Nos hace sobrevivir!